Ya sabéis que en TCT tenemos nuestra particular visión de las cosas. Donde algunas personas ven basura, nosotras vemos ¡posibilidades!.
Ésto, que en alguna ocasión puede suponer un problema (por aquello de no pasar el límite hacia el Síndrome de Diógenes), hay veces que nos da gratas sorpresas, como el jueves pasado, que nos encontramos estas dos joyas:
- MARAVILLOSA MESA DE CENTRO: bueno... le falta un ala, pero... apunta maneras para ser el perfecto escritorio
¡Nos encantan esas patas!
Pues después de hacer el trabajo sucio, que es recoger los muebles de la calle, (gracias a Ana y Patricia, por su inestimable ayuda *) ahora nos queda ponernos manos a la obra.
* Recordad, sóla no puedes, con amigas ¡sí!
Ya hemos empezado con la silla, después de limpiarla desmontamos el asiento y el respaldo. La decapamos (con mucho cuidado, y lejos de elementos inflamables) y retiramos el barniz con ayuda de una espátula
Y ya luce así de bien:
Estas últimas semanas estamos muy inspiradas, y con muchas ganas de
trabajar, así que, con un poco de suerte y si nos seca a tiempo la
pintura, os mostraremos el resultado dentro de un par de días.
¡Feliz semana!
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