jueves, 28 de noviembre de 2013

una prueba de vida: caja de vino recuperada

Lo primero que vamos a hacer es pediros disculpas por tener la casa desatendida, así que hoy vamos a publicar una entrada como prueba de vida, por si acaso alguien se pensaba que habíamos desaparecido... Y es que estamos un poco flojas, no sé si por el tiempo, el cansancio o ¿se nos estarán acabando las ideas? noooooooooooooooooooo, ¡eso no!

La entrada de hoy es una prueba de que todas las ideas no son buenas, o cómo a veces haces cosas que no te gustan y repites, y repites, y repites, hasta que das con ello. 

En nuestro afán de recuperar objetos fuera de uso, nos empeñamos en transformar dos cajas de vino que nos dio un amigo, conocedoras de las múltiples posibilidades que ofrecen (cajones, estantes, estanterías...).

Y ahí empezó el calvario: pintamos, envejecimos con betún de judea, forramos el interior con papel, pusimos ruedas... 


... Y la convertimos en un estante móvil.

Pero no nos convenció. Estaréis de acuerdo, ¿no? y más aún después de ver la foto :(


Así que sobre las 6 de la tarde, y pensando que ya era hora de colgar alguna novedad, lo decidimos: cogimos los retales de tela que nos sobraron de otros tuneos y los pegamos con cola diluida en agua. Tal cual: sin planificar, a lo loco, sobre la marcha. Vamos, como somos nosotras.

Por lo menos ya tenemos dónde meter los ovillos de lana y de paso, alegrar la vista con tanto colorido.

Gracias por seguir ahí, buenas noches y ¡hasta mañana!

martes, 19 de noviembre de 2013

cestita de picnic

Hoy que estamos en alerta de nieve y bajas temperaturas en la zona norte de España , a las chicas de TCT nos ha parecido el momento perfecto para enseñaros como tunear una cesta de picnic...sí sí habéis oído bien...para llevaros la merienda al campo, al parque ó a la estación de esquí....¿quién dijo miedo?
Para ello, partimos de una cesta de madera sin tratar:




pintamos el exterior de la cesta
con pintura acrílica de color rojo

el interior lo forramos con tela, la fruncimos
y la grapamos al interior de la cesta
Para ocultar las grapas, pegamos una cinta de pasamanería color beige que nos había sobrado de otra entrada. 
Y el resultado es esta cesta tan resultona (mucho más si el fondo sobre el que se coloca es un suelo nevado...jeje)

¡Abrigaros bien si salís a la calle TeCeTer@s!

martes, 12 de noviembre de 2013

espejo decorado, esta vez con servilleta de tela

En unas rebajas nos encontramos con una liquidación de textil del hogar a precios increíbles, y aunque no teníamos pensado ninguna de las dos en gastar dinero en "vestir" la casa, compramos alguna cosilla con el fin de aprovecharla en uno de nuestros tuneos,como hicimos con la silla de oficina tapizada con la tela de un cojín,






Así que en esta ocasión aprovechamos una de las servilletas que nos quedaban para hacer uno de nuestros habituales tuneos: un espejo forrado de tela.

El paso a paso ya os lo hemos enseñado en más de una ocasión: más fácil imposible

  1. Aplicando calor con un secador, quitamos la pegatina con el precio del espejo (¡¡¡TRUCO INFALIFLE!!)
  2. Lijamos para que se adhiera mejor la solución de cola blanca y agua para pegar la tela
  3. Tomamos las medidas al espejo y las marcamos con un lápiz
  4. Pasamos un pincel empapado en la solución sobre las marcas del lápiz. Cuando esté seco, podremos cortar sin que se deshilache la tela (otro ¡¡TRUCO INFALIBLE!!)
  5. Damos una capa de la solución de cola y agua por todo el espejo, sin que queden huecos, y sin echar demasiada cantidad
  6. Con cuidado, posamos la tela al espejo y la vamos alisando para que no queden burbujas

Un bonito detalle que podéis hacer de forma rápida y sencilla. 
¡Hasta la próxima entrada!


PD: sí, estamos un poco vagas y hemos copiado el tutorial de ésta otra entrada que publicamos hace tiempo... 

jueves, 7 de noviembre de 2013

humm, café rico.... y decorativo


Pues sí, hoy más que nunca podemos decir... Ójala que llueva café... Porque además de amantes de este caldo, hemos descubierto sus propiedades decorativas.

Todo empezó con el tuneo de este cofre:



Ya sabéis que somos unas incondicionales de "El Corto Maltés", así que decidimos repetir algo parecido a lo que hicimos con el baúl hace ya unos meses.

En aquella ocasión, envejecimos las ilustraciones con betún de judea diluido con aguarrás, pero fue una tortura porque había que tener muchísimo cuidado con las cantidades ya que a la mínima se emborronaba todo y resultaba demasiado graso. Coincidió que nos habíamos pasado por el blog de Clara (si todavía no la conocéis, pasaros a hacerle una visita, os encantarán sus muebles, relatos y reflexiones) y vimos como utilizaba té para decorar un mueble. Fue entonces cuando se nos ocurrió y nos pusimos a experimentar, pero el té resultaba demasiado flojo, así que probamos con café.



Nos gustó el resultado:



Así que decoramos el cofre con las ilustraciones teñidas (y secas), pegándolas con cola blanca diluida en agua. Una vez seco, le dimos un par de capas de barniz transparente en spray para protegerlo.


  
Así quedó con unos cuantos años más encima. 

Y ahora sí, nos vamos a tomar un café, que tengáis una muy feliz semana.



martes, 5 de noviembre de 2013

sillita infantil de búhos

Siguiendo con nuestras creaciones para los más pequeños, nos encontramos hace unas semanas con esta mini silla de madera en un mercado y, literalmente, nos enamoramos de ella!!!...Con esos barrotes torneados nos recuerda a las mecedoras de l@s abuel@s, pero en este caso, adaptado a los más chiquitin@s de la casa.


Como la silla original era tan bonita, poco más teníamos qué hacer para que el resultado fuera perfecto.
El paso a paso es muy sencillo, así que pódeis animaros a intentarlo:
1º- lijamos y damos un para de capas de pintura azul

2º- aprovechamos un resto de espuma para
tapizar que nos quedó de otra silla y lo
cortamos a medida con un cúter




Pegamos la espuma al asiento de madera, la cubrimos con una vistosa tela de búhos  y la grapamos a la madera. Para ocultar las grapas, embellecimos el acabado con una pasamanería de color azulado.
Ya sólo quedaba darle unos toquecitos de lija, para darle un aspecto envejecido a nuestra sillita.
El resultado nos ha quedado así:


 ¿Os gusta?
¡Un beso TeCeTer@s!