¡Y así es! ¡No sabemos decir que NO!!
Uno de los últimos "Nena, iba a tirarla..." puso en nuestras manos esta lámpara estilo araña.
La verdad es que la tuvimos tiempo parada en el taller, hasta que se nos planteó un dilema con la lámpara de una habitación...comprar una nueva o reconvertir este tesoro olvidado. Así que a ello nos pusimos:
1.- lo primero fue quitar todos los colgantes de cristal que decoraban cada brazo y reservarlos |
2.- después limpiamos con alcohol
cada detalle para quitarle restos de polvo o suciedad adherida |
Lo sentimos, pero no disponemos de fotos del "durante" de esta transformación; así que os lo resumimos:
3.- damos una capa de imprimación a todos los brazos (para que la pintura luego "agarre" mejor).
4.- después damos dos capas de pintura acrílica azul. En este punto, os aconsejamos encarecidamente que utilicéis pintura en spray....no hagáis como nosotras y lo pintéis a brocha y pincel, porque las horas que os puede llevar tanto brazo, tanta hojita y tanto detallito...os puede hacer envejecer una década en paciencia (lo decimos por experiencia).
5.- llega la mejor parte: aprovechando los enganches originales de la lámpara, fuimos añadiendo una cinta de bolas blancas (que teníamos en el desván de un árbol de Navidad) y los colgantes blancos originales.
6.- ya sólo nos quedaba colocarle bombillas de bajo consumo y colocarla en su nueva ubicación.
El resultado nos ha dejado muy satisfechas :))))
La lámpara ha quedado realmente preciosa, pero INSISTIMOS, la próxima con pintura en spray!!
¡Qué tengáis una gran semana TeCeTer@s!